Dale vitá a tu vitá

Dale vitá a tu vitá
Somos lo que pensamos y vivimos

Thursday, February 1, 2024


Nunca Digas Nunca

Ahora sé porque las personas odian y prefieren aferrarse a su ego que a un sentimiento,
Porque quizás siempre haya un cobarde que no esté dispuesto a dar la lucha por eso,
Definitivamente el amor es desconsuelo,
No importa cuánto sacrifiques,
Nada hará cambiar de parecer ni una vida, un cuerpo o los sueños en los que tanto espero,
Todo eso se fue junto con él.

Cuanta felicidad tenía antes de estar dispuesta a sentir,
Antes de depender de alguien para vivir.

Ese cuervo gris que no compagina en una pintura pueril,
Ese paño de lágrimas con el que frote más de un rostro ahora lo tengo en mí,
Revelándome lo que nunca fui capaz de creer.

Me arriesgué a la nada, y eso fue lo que conseguí,
Cuando poderosa es una mentira en los labios de una supuesta víctima,
Y cuando infame e insensato se ha vuelto mi corazón capaz de confiar hasta en la sombra del DON. 

Si fue toda una vida donde comprendí que el amor era irreal,
Y por las noches juraba amargamente nunca más dejarlo todo por quien amas,
Y ahora que tuve el valor me encuentro con una terrible llamarada de desapego,
No encuentro ahora explicación que se ponga a mi favor,
Y me dé la razón de haber dejado todos mis miedos por una pasión.

Es momento de admirar a aquellos quienes han logrado enfriar su sentir,
Quienes abandonaron un motivo feliz por un complaciente olvido infeliz,
Que no paga al que sirve con engaño y desatino,
Ese es quien debe darse por buen servido.

Porque aun tiene lo que aprecia,
Y ha dejado a la deriva lo que pensaba que apremia
Que además nubla sus sentimos y conduce a la autodestrucción.

Cuanta sabiduría hay en dejar que el mundo haga lo suyo
Sin forzar al destino a querer hacerlo por sí mismo,
El y el tiempo se han dado a la tarea de mostrarme el camino,
Que aunque no quería debo seguir.
Es lo conveniente para poder existir.

Estuve tan cerca del fin,
Que hoy aprecio lo poco que queda para perseguir,
No con una vida de “victorias” donde la materia es lo que verdaderamente importa,
Sino con derrota tras derrota,
Y no fueron solo tres sino más de cien las luchas perdidas sin causa aparente
Solo quizás un sentimiento que creía era aceptado y valorado por ambos,
Pero no fue así.
Es esta la vida que me toco vivir,
Aceptar de una vez por todas que hay quienes salen estrellas y quienes salen estrellados,
Que mientras unos son enamorados, otros jamás serán amados;
Que la felicidad es momentánea, algo pasajero que no alcanza a llegar al alma;
Que no se puede amar a dos personas a la vez,
O eres tú o es él;
Si decides amarlo a él, corres el riesgo de que él se ame mas así mismo que a tu propia fe.

Es esta la cima en donde estoy ahora,
Muchos colores pero sin nadie en que pueda disfrutar tanta belleza a mi alrededor.
Sin libertad aparente,
Se piensa que ella es “disfrutar” y probar lo que a sus ojos nunca se entenderá.
Pero la libertad va más allá de lo físico,
No es matar por matar,
Es saber que aunque todos quieran colonizarte, nunca han podido cegarte
Continuar con ideas que a tu parecer son las correctas,
Y que importan golpes, encierros, muertes, y reproches…
No recibiré influencias ni críticas llevaderas,
Con una sonrisa conformista me doy cuenta que el mundo habla pero no aplica,
Siempre que quiebro su barrera se desesperan,
Porque llegó la hora de la elección y ese ser nunca grito por lo que quería,

Una enorme presión en su pecho lo invadía,
Un rencor sin suplica sincera era lo que tenía,
Un sentimiento y un sueño, muertos a causa del miedo, perecían

Lo que provocaba tanta veracidad,
Era la maldad de quienes sin cansancio derrochaban en hablar,
Tan escasa creencia en palabras de una mujer que estuvo dispuesta a todo por ese ser,
Que aunque lo perdió todo, siguió soñando y sonriendo por él.

“El amor es sacrificio”,
“el amor es entrega sin egoísmo”,
 “el amor es perdón sin pedirlo”,
“el amor finalmente es el olvido”…

Un olvido que curara tantas palabras al vacio,
Que sanara cada fractura que por tu delirio te dejo en el piso,
Aquel que me hizo darme por vencido,

Un olvido que dejo ver que el amor algunas veces no es suficiente para irse en contra del cinismo,
Será una ilusión un sueño
Y los sueños, sueños son.

Ahora solo queda arrancarse el corazón,
Pues de nada sirvió,
Solo trajo dolor, recuerdos y resignación
Se borraron tantos objetivos y desvelos.
Hay algo en mi interior que deseo con fervor seguir luchando por amor,
Pero aun queda la conciencia, suficiente para echar a la pena un muero de madera,
Con más de mil promesas, miradas y caricias que en su tiempo impulsaron mi avaricia,
De amar sin medida,
De un fuego que llenaría mi vida,
Pero por primera vez los refranes no se equivocan,
Y ya la vida deja de ser una metáfora sin derrota,
“una vez la confianza se pierde no hay nada por hacer”.

El ser humano se diferencia del animal de carga, solo en una cosa
No resiste más de dos semanas con solo azotes y patrañas,
Es tan débil que ni siquiera un sentimiento tan fuerte fue capaz de revivir una esperanza…

Es hoy cuando me doy por segunda vez vencida,
Declaro mi derrota, como gladiador con honra
Y me sumo en pensamientos antiguos de mundo y destino,
Para nunca más recordar que un caballero lucho sin armadura,
Pisando fuego, atado de pies y manos para huir en su búsqueda.

--El Fin justifica los medios – Hasta el fin.

Posdata:

Ahora somos dos lo que intentaran dar olvido,
Dos amantes que abandonan la carrera para continuar con el naufragio fallido,
Es hora del tiempo porque ya no hay más.






















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